Caso Petaco Barrientos: nuevo allanamiento en Laguna Paiva en busca de los prófugos

Los dos hombres que se encuentran comprometidos con pruebas firmes en cuanto a su participación en el asesinato de Gustavo “Petaco” Barrientos, permanecen prófugos de la Justicia.

Un mes después de los allanamientos en los cuales fueron a buscarlos, se realizó otro procedimiento también en la localidad santafesina de Laguna Paiva. Tampoco localizaron a los acusados de integrar la banda de sicarios, pero trasladaron a un hombre para su identificación, Continúa la búsqueda para poder detenerlos.

Se trata de Diego Germán Costa y Juan Sebastián Gomila Bordiga, quienes se cree que tuvieron información previa para no ser capturados el viernes 8 de septiembre, cuando se hicieron allanamientos con irrupción tanto en Laguna Paiva como en domicilios de Moreno y José C. Paz en la provincia de Buenos Aires.

Se informó a ANÁLISIS que en horas tempranas de este martes, efectivos policiales de la Agencia de Investigación Criminal de la Policía de Santa Fe llevaron adelante el allanamiento ordenado por la Justicia ante la información de que posiblemente los dos prófugos se encontraran allí. Pero Costa y Gomila Bordiga volvieron a escabullirse.

Un hombre fue demorado y trasladado a la sede policial para su correcta identificación, informaron desde la fuerza de seguridad de la vecina provincia, al terminar el procedimiento.

Cabe recordar que el homicidio ocurrió en la casa quinta que Barrientos tenía en Colonia Ensayo, Departamento Diamante, durante una salida socio familiar, el sábado 18 de marzo a la tarde. Nueve sicarios llegaron en una camioneta Toyota SW4, ocho irrumpieron en la vivienda y acribillaron a tiros al jefe narco del barrio Municipal.

Desde el inicio, la principal hipótesis de la investigación apuntó a un ajuste de cuentas por el mercado de drogas en la capital provincial, y siempre se dirigió la búsqueda hacia Santa Fe, que es hacia donde se presume que los asesinos huyeron luego del crimen: se dirigieron en la camioneta hacia Puerto Alvear y desde allí se subieron a una embarcación por el río Paraná.

De hecho, en mayo hubo allanamientos por esta causa en la ciudad de Santa Fe (en la zona norte y en la cárcel de Las Flores), que apuntaron al entorno de un conocido narcotraficante santafesino con mucho poder en Paraná.

Tal como publicó la Revista ANÁLISIS, en la investigación de la División Homicidios, instruida por la Unidad Fiscal de Diamante, con la participación además de las direcciones Criminalística e Inteligencia Criminal, se halló prueba científica irrefutable que ubica a los dos sospechosos en una parte fundamental de la escena del crimen. Como se trata de un tipo de evidencia que no les permitirá ensayar ninguna coartada (su defensa se abocará seguramente a atacar su validez) es que se fugaron ni bien se enteraron de que los estaban buscando. Por eso tampoco se presentaron más tarde en la Fiscalía con un abogado como inocentes que se ponen a derecho.

Diego Germán Costa tiene 38 años. Es, entre los dos buscados, el considerado “más pesado”. Por un lado, porque tiene un asesinato en su haber, perpetrado en la ciudad de Santa Fe, con una condena de nueve años de prisión. Además, le habían endilgado otro homicidio, aunque finalmente la Justicia consideró que no había pruebas suficientes para implicarlo. Por otro lado, porque los movimientos que observaron los investigadores mientras averiguaban de quién se trataba, eran sigilosos, propios de un hombre con experiencia en el hampa, con contactos en peligrosas bandas de narcotráfico. Se movía entre Laguna Paiva, localidad ubicada a unos 40 kilómetros al norte de Santa Fe, y la provincia de Buenos Aires, concretamente las localidades de Moreno y José C. Paz, dos lugares donde campean organizaciones dedicadas a la distribución de drogas en la región. Pero lo suyo, dicen en su entorno, es el gatillo.

Juan Sebastián Gomila Bordiga tiene 27 años y su nombre no surge en el registro de antecedentes penales. Aunque sí tiene un entorno familiar vinculado al delito. Más precisamente, un hermano que era agente penitenciario de Santa Fe fue condenado por venta de drogas en las localidades de Laguna Paiva y Nelson, de la vecina provincia. A mediados de 2020, en un allanamiento en su vivienda le encontraron unos 800 gramos de cocaína, en el marco de una investigación en la cual se lo acusó de ser el encargado de “aprovisionamiento de material estupefaciente a diversas personas de Laguna Paiva”. Lo condenaron a cuatro años y tres meses de prisión.

Investigadores de Santa Fe consultados por ANÁLISIS coincidieron en que no se trata de dos improvisados, sino de personajes del ambiente delictivo con vínculos a bandas pesadas de esta provincia.