Diamante, Ciudad de Paz (Nota de opinión)
Diamante, una pequeña ciudad pueblerina, del interior de Entre Ríos, donde el sueño de la tranquilidad parecía haberse diluido por el accionar de tres o cuatro malvivientes.
Hoy gracias al funcionamiento del personal policial en las últimas dos gestiones a cargo de la Jefatura Departamental nuevamente parece haberse encarrilado en su andar tranquilo y sereno, donde se puede transitar libremente y sin miedo.
Pero también debemos ser claro, siempre quedan algunos reservorios de maldad, en algunos sectores de la sociedad, así también hemos visto que las instrucciones recibidas y ejecutadas por las fuerzas policiales están decididos a terminar con la inseguridad, algo en que la comunidad y la Justicia debe acompañar trabajando a la par de nuestras fuerzas de seguridad, denunciando cualquier hecho sospechoso, sin temor a quedar en ridículo si están equivocados.
Después del Festival Nacional de Jineteada y Folclore, año tras año, quedaba en la sociedad un grado de efervescencia que al parecer no se ha dado estos años, sucede lo mismo cada vez que se lleva a cabo el Moto-encuentro Internacional, que esperemos este año repita luego de llevarse a cabo, la misma tranquilidad que nos dejó este Festival de Jineteada y Folclore.
Desde el día martes hasta hoy no hemos registrado incidentes de índole policial, más allá de algún detenido por contravención y el último intento de hurto o robo sucedido el día miércoles y que fuera rápidamente aclarado por el personal policial, a pesar de estar ejecutando el programa Barrios Seguros con gran cantidad de personal afectado.
El movimiento en sí de Diamante, parece adherirse a esta paz o tranquilidad de este momento, viendo calles despejadas, donde el tránsito es tranquilo, sin locuras al volante ni velocidad excesiva.
De esta manera Diamante será visitada y apreciada por quienes buscan refugio a la “locura” que se vive en otras ciudades de mayor cantidad de habitantes y que encuentran en estas ciudades la paz interior que necesitan.