Emergencia sanitaria por viruela del mono en Argentina

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado una emergencia sanitaria mundial debido al brote de viruela símica, también conocida como Mpox.
Este brote, cuyo epicentro se encuentra en la República Democrática del Congo, ha generado preocupación global al extenderse a 13 países cercanos y llegar a Europa y América del Norte. El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, enfatizó la gravedad de la situación, destacando que debería “preocupar a todos”.
En Argentina, el Ministerio de Salud ha confirmado cinco casos de viruela del mono en lo que va del año 2024. Estos casos se distribuyen en las provincias de Buenos Aires, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Santa Fe y Río Negro. De los cinco casos confirmados, cuatro corresponden a hombres y tres tienen antecedentes de viaje o contacto con viajeros. Afortunadamente, no se han registrado muertes por el virus en el país.
La viruela símica se transmite de animales a humanos y de persona a persona a través del contacto físico piel a piel. Los síntomas incluyen fiebre, exantemas vesiculares en distintas partes del cuerpo (genitales, perianales, manos y rostro), mialgias, cansancio, dolor muscular o de cabeza, inflamación de los ganglios y dolor en la región genital, el ano o el recto. La enfermedad suele ser autolimitada, resolviéndose espontáneamente en un período de 14 a 21 días.
La OMS ha subrayado la importancia de la situación, señalando que la emergencia de salud pública de importancia internacional representa el máximo nivel de alarma según el derecho sanitario internacional. La posibilidad de una mayor propagación dentro de África y más allá es motivo de gran preocupación. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África también han declarado el brote como una emergencia de salud pública de importancia continental.
Ante esta situación, es crucial que la población esté informada y tome medidas preventivas para evitar la propagación del virus. Se recomienda evitar el contacto cercano con personas infectadas, mantener una buena higiene personal y estar atentos a los síntomas mencionados. La colaboración de todos es esencial para controlar este brote y proteger la salud pública.