Misteriosa figura siembra temor en Basavilbaso

En el extremo norte de Basavilbaso, un rumor inquietante ha comenzado a sembrar temor entre algunos residentes.

Desde hace semanas, varios vecinos han reportado la presencia de una figura misteriosa que aparece en la penumbra, justo antes del amanecer, a unos 300 metros del Cementerio Municipal. Este extraño ente, que porta una vela encendida, ha sido visto también en otros puntos de la zona, como el tramo final de la Calle Concordia, cerca de la plaza del barrio San José, y con mayor frecuencia en el camino vecinal hacia Libaros, donde ha sido avistado hasta tres veces en una sola semana.

Los testimonios sobre este fenómeno son variados y, en muchos casos, contradictorios. Quienes afirman haber tenido encuentros directos con esta entidad prefieren no comentar su experiencia, temerosos de las burlas que podrían recibir, dado que la mayoría de los vecinos se muestra incrédula. Sin embargo, algunos han descrito el fenómeno como algo “terrorífico”. Según un par de jóvenes, una figura sin rostro, que sostenía una vela, se desplazaba de forma zigzagueante por el camino de tierra, una experiencia que también habrían vivido días antes unas estudiantes que se dirigían a un colegio cercano.

En medio de la creciente especulación, un video ha comenzado a circular en las redes sociales, supuestamente capturado en la zona donde han ocurrido los avistamientos. El video apenas deja ver la silueta de la vegetación más prominente, pero lo que más llama la atención es el audio, que contiene sonidos extraños y perturbadores. Este material ha generado aún más debate entre los vecinos, dividiendo a la comunidad entre aquellos que consideran que todo es parte de una broma elaborada y los que creen que algo más inexplicable podría estar sucediendo.

Aunque la mayoría prefiere no entrar en detalles, algunos valientes han compartido sus vivencias pero pidiendo que se reserven sus datos filiatorios. Se habla de una silueta que recuerda a una religiosa, vestida con un hábito y zapatillas, que parece intentar disuadir a las personas de transitar por la zona. Los movimientos de esta figura son descritos como no humanos, lo que ha alimentado la especulación sobre su naturaleza.

Uno de los testimonios más intrigantes proviene de una vecina que reside al este de la Calle Concordia. Ella asegura haber recibido una extraña visita en la oscuridad, de alguien vestido de manera similar a una monja, quien le lanzó una esquela cuyo contenido permanece en secreto. Las cámaras de videovigilancia de su hogar, según confió a sus allegados, apenas lograron captar un “bulto blanco y negro” que apareció y desapareció rápidamente. Mientras algunos residentes se toman la situación con humor, atribuyéndola a las travesuras de algún bromista y descartando cualquier explicación paranormal, otros prefieren evitar la zona durante las primeras horas de la mañana, por si acaso.