Starbucks cerrará 90 sucursales en 23 estados de Estados Unidos

Starbucks, la reconocida cadena de cafeterías, ha revelado un plan para cerrar o reconvertir 90 de sus sucursales en 23 estados de Estados Unidos a partir de 2026.
Esta decisión responde a una reorientación estratégica destinada a revitalizar la esencia de la marca, priorizando experiencias más cálidas y personalizadas para sus clientes. Según la compañía, los locales diseñados exclusivamente para pedidos móviles han perdido la conexión humana que caracteriza a Starbucks, lo que ha motivado esta reestructuración.
El presidente y director ejecutivo de Starbucks, Brian Niccol, señaló que las tiendas de formato “pick-up” o entrega rápida, enfocadas en transacciones ágiles, no cumplen con los valores fundamentales de la marca. Por ello, estas sucursales serán clausuradas o transformadas en cafeterías tradicionales con espacios para el consumo en el lugar. Ciudades como Los Ángeles, San Francisco y Nueva York se verán particularmente afectadas, con cierres confirmados en ubicaciones emblemáticas, como la tienda de la 42nd Street con Park Avenue en Manhattan.
El plan impactará a múltiples estados, incluyendo Arizona, California, Colorado, Florida, Illinois, Massachusetts, Michigan, Minnesota, Ohio, Texas, Virginia y Washington, entre otros. En California, ciudades como Glendale, Santa Mónica y San Diego perderán locales de recogida rápida, mientras que en Arizona, algunos establecimientos en Tempe y Chandler podrían adaptarse para ofrecer servicio completo en lugar de cerrar. Esta reconfiguración busca alinear la experiencia del cliente con un enfoque más tradicional y acogedor.
La estrategia, bautizada como “Back to Starbucks”, responde a un cambio en las preferencias de los consumidores, quienes buscan interacciones significativas y un mejor manejo de sus gastos en alimentos y bebidas. Aunque Starbucks ha cerrado varias tiendas en San Francisco en los últimos meses, también ha inaugurado nuevas ubicaciones en lugares como Bluffton, Carolina del Sur, lo que demuestra que la empresa no está reduciendo su presencia, sino ajustando su modelo operativo para adaptarse a las demandas del mercado.
Con más de 16,000 sucursales en Estados Unidos, Starbucks asegura que los clientes seguirán teniendo acceso a sus servicios, incluso en las zonas afectadas por los cierres. Los pedidos móviles continuarán disponibles, pero deberán recogerse en cafeterías tradicionales. Este cambio refleja el compromiso de la compañía por recuperar su identidad como un espacio de conexión, mientras se adapta a las necesidades de un público que valora tanto la calidad como la experiencia en sus visitas.