La artista Emilia Mernes vive un presente de gloria en el escenario internacional.
Con tres shows agotados en el Movistar Arena de Madrid y una impactante portada en Elle España, la cantante de Nogoyá se posiciona como una figura clave del pop latino, sin dejar de lado su esencia familiar ni su compromiso con la autenticidad.
En su entrevista con la revista, Emilia recordó con humor la panadería de su tío, donde pasó buena parte de su infancia, y remarcó que su ascenso no fue fortuito. A fuerza de constancia y disciplina, logró superar barreras para convertirse en una de las artistas más influyentes de su generación. Su estilo combina dulzura, sensualidad y cercanía con una voz inconfundible.
Más allá del glamour europeo, Emilia no olvida la cultura del esfuerzo aprendida en su casa. “Mi papá trabajaba sin faltar un solo día”, contó, y agregó que ese ejemplo guía su ética profesional. La joven que empezó subiendo covers en redes sociales hoy llena estadios y acumula nominaciones, mostrando que la perseverancia da frutos.
La cantante también alza su voz sobre temas sociales. Criticó el doble estándar que sufren las mujeres en la industria musical, y el constante escrutinio mediático que enfrenta. Defiende su derecho a mostrar su cuerpo como una elección personal, no como una estrategia de sexualización. Para afrontar esa presión, cuenta, la terapia fue clave.
Emilia Mernes es, en definitiva, mucho más que una estrella del pop: es una mujer que construye su camino sin renunciar a su historia, que transforma cada logro en inspiración para otros y que redefine qué significa triunfar sin perder la esencia. Desde Nogoyá al mundo, con brillo propio.
