Tailandia busca fortalecer el control de armas tras el violento incidente en el centro comercial
El primer ministro de Tailandia prometió “medidas preventivas” luego de un tiroteo en un centro comercial de Bangkok que dejó tres personas muertas, generando nuevas interrogantes sobre el control de armas en el país.
El centro comercial Siam Paragon reabrió menos de 24 horas después del suceso, pero los compradores volvieron lentamente debido a este tercer ataque armado mortal de alto perfil en cuatro años en Tailandia.
Este trágico incidente en uno de los centros comerciales más grandes y lujosos de Bangkok representa un duro golpe para los esfuerzos del país por reconstruir su vital industria turística después de la pandemia.
El primer ministro, Srettha Thavisin, se unió a un minuto de silencio en el centro comercial antes de ofrecer las condolencias del gobierno a las familias de las dos víctimas, una de origen chino y otra de Myanmar.
“Confío en que Siam Paragon y los funcionarios gubernamentales hicieron todo lo posible para minimizar las víctimas y los daños”, declaró. Además, agregó que su gobierno dará prioridad a las medidas preventivas sin proporcionar detalles al respecto.
La policía ha acusado a un sospechoso de 14 años de asesinato premeditado, intento de asesinato, portar y disparar un arma en un lugar público y poseer un arma de fuego sin licencia.
Según los investigadores, el niño, estudiante de una escuela privada, había estado recibiendo tratamiento para una enfermedad mental, pero dejó de tomar su medicación y afirmó escuchar voces que le ordenaban disparar a la gente.
Después de reunirse con el primer ministro, el Jefe de la Policía Nacional ordenó a los oficiales especializados investigar las ventas de armas en línea.
Además, se reveló que el arma utilizada en el ataque era una pistola de fogueo.
