Inauguración de un Espacio de Memoria en Gualeguaychú

En Gualeguaychú, las militantes de la Asociación Madres de Plaza de Mayo continúan su lucha por la memoria, la verdad y la justicia, a pesar de los desafíos. A principios de año, el Museo de la Memoria fue cerrado por el nuevo intendente Mauricio Davico y convertido en una sede de la Subsecretaría de Cultura. Sin embargo, el sábado se inauguró un Espacio de Memoria en la antigua Unidad Penal número 2 de la ciudad.

Matías Ayastuy, militante del organismo de derechos humanos que impulsó y gestionará el nuevo espacio, destacó su compromiso con la resistencia al negacionismo y la construcción de la memoria. Este espacio es un testimonio de la historia de la Unidad Penal número 2, que se convirtió en un lugar de detención para presos políticos en 1974.

La asociación Madres de Plaza de Mayo ha trabajado en la preservación de ciertos espacios de la prisión que fueron significativos durante la detención de presos políticos en la década de 1970. Entre ellos se encuentran la celda colectiva que comenzó a funcionar en 1975, la celda que compartieron Enrique Guastavino y Daniel Irigoyen, y el espacio donde atendía el cura Fortunato, solidario con los presos políticos.

El acto de apertura del Espacio de Memoria atrajo a un gran número de personas, incluyendo militantes de la Red de Organismos de Derechos Humanos de Entre Ríos y ex presos políticos de diferentes ciudades de la provincia. Daniel Irigoyen, militante, ex preso político y ex intendente de Gualeguaychú, fue uno de los voceros del acto de apertura.

El plan de gestión del Espacio de Memoria, que no cuenta con recursos oficiales y se ha desarrollado gracias a aportes solidarios y en su mayoría anónimos de la comunidad, incluye su apertura a la comunidad. Ayastuy destacó la importancia de este espacio para el barrio y su compromiso de acompañar a aquellos que deseen conocerlo.