Parque Nacional Pre Delta: un predio para disfrutar el contacto con la naturaleza

El parque ubicado a 45 kilómetros de Paraná y es un predio para disfrutar de la naturaleza y contemplar la biodiversidad. El camping cuenta con un espacio para acampar y es muy concurrido durante el verano.

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El Parque Nacional Pre-Delta está ubicado en Diamante a 45 kilómetros de Paraná, en el departamento Diamante. Dominado por islas, arroyos, lagunas y riachos con la influencia del gran río Paraná, cuyas crecidas modelan un paisaje que está en continuo cambio. Además, el Paraná es un corredor de biodiversidad que aporta a la región animales y plantas típicos de la selva misionera y el Chaco.

El parque fue creado en 1.992 por Ley Nº 24.063, con el fin de preservar una muestra representativa del Delta Superior del majestuoso río Paraná.

En sus principios tenía una extensión de 2.604 hectáreas pertenecientes a la ecorregión Delta e Islas del Paraná. Luego en el año 2.010 se incorporó el Campo Coronel Sarmiento con el fin de conservar y restaurar ambientes típicos del bosque de barranca y el espinal. En la actualidad el área protegida tiene una superficie total de 2.750 hectáreas.

Uno de los guardaparques, Ariel Camarán, expresó ante Elonce que “el Pre Delta es un lugar muy importante para la conservación de especies y es ideal para visitarlo y contemplar la naturaleza”.

“El Parque está abierto al público, se puede acampar, es libre y gratuito, y tiene una función educativa en cuanto a la flora y la fauna del lugar”, sumó.

Camarán destacó que el camping para acampar es muy elegido por las personas “ que desean tener un contacto directo con la naturaleza”. Además, sumó que el paisaje cambia constantemente debido a la altura del río.

“El río nos está marcando cuestiones que debemos atender y estamos padeciendo una bajante del río que ocasiona un proceso crítico y se pone sensible el ambiente”, sumó.

Una de las partes más llamativa es “La Azotea” es una barranca natural donde podemos encontrar hermosas aves como el celestino, el brasita de fuego y el frutero imperial. En las lagunas que se forman en las zonas centrales deprimidas de las islas, los irupés de enormes hojas flotantes destacan entre la vegetación; mientras que en los sitios más altos, se extienden bosques ribereños de sauce criollo, timbó, alisos de río y ceibo. Por su parte, en zonas de aguas abiertas viven patos, garzas, cigüeñas y gallaretas.


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