Viviendas anegadas en Villaguay y corte del tránsito en Ruta 130 por el temporal

Una fuerte tormenta azotó este sábado la ciudad de Villaguay, en Entre Ríos, dejando a su paso inundaciones, anegamientos y cortes de tránsito.

La lluvia, que comenzó alrededor de las 11 de la mañana y se extendió por casi una hora sin interrupción, superó la capacidad de los sistemas de desagüe, provocando el desborde de canales y arroyos. La zona sur de la ciudad es una de las más afectadas, con calles completamente anegadas y familias que han visto sus viviendas invadidas por el agua.

Vecinos de barrios como San Luis, España y el barrio de suboficiales, cercanos a la antigua estación de trenes, reportaron graves anegamientos en sus hogares. En el barrio CGT, ubicado en el sureste de la ciudad, los residentes monitorean constantemente la situación, ya que el desborde del arroyo Villaguay podría agravarse si las lluvias continúan. Aunque el caudal del arroyo estaba bajo antes del temporal, el rápido aumento del nivel del agua ha generado preocupación.

El tránsito también se vio severamente afectado. La Ruta Nacional N° 130, que conecta Villaguay con Villa Elisa, está parcialmente cortada debido a las condiciones climáticas. En la Ruta 20, a la altura de la localidad de Las Moscas, el agua avanzó sobre la calzada, lo que obligó a implementar un sistema de tránsito asistido para garantizar la seguridad de los conductores. Además, el empalme Neild, uno de los principales accesos a la ciudad, quedó bloqueado, dificultando el ingreso por la zona sur.

Las calles pavimentadas de la ciudad se encuentran cubiertas de agua de cordón a cordón, lo que ha hecho imposible la circulación normal de vehículos y peatones. En algunas intersecciones, el nivel del agua es particularmente profundo, aumentando el riesgo para quienes intentan transitar. Vecinos de calles como Saavedra, Rogelio Martínez, Montenegro y Buenos Aires también reportaron anegamientos en sus viviendas, lo que ha generado una situación de emergencia en varios sectores de la ciudad.

Las autoridades estiman que se necesitarán al menos dos horas para que el agua acumulada comience a escurrir y se reduzca la incertidumbre. Mientras tanto, los residentes afectados buscan proteger sus pertenencias y resguardarse en zonas seguras. Este fenómeno climático extremo ha dejado en evidencia la vulnerabilidad de la infraestructura local frente a las intensas lluvias, y ha puesto a prueba la capacidad de respuesta de la comunidad y las autoridades.